Para adelgazar rápido, ¿por qué no echamos un ojo a las dietas más cool de Instagram?
Dietas Detox:
Estas dietas afirman eliminar las tóxinas de nuestro cuerpo reduciendo nuestras comidas a frutas y verduras, principalmente sin cocinar (o muy poco cocinadas) o en forma de zumos o batidos. Nos prometen depurar nuestro organismo, hacernos adelgazar rápido y prevenir, o incluso curar, algunas enfermedades.
Claro que ayudan a perder peso, porque entre otras cosas proponen eliminar la comida basura como pizzas, hamburguesas, refrescos.... ¡Así adelgazamos todos!
Pero cuando la gente vuelve a su dieta habitual todos esos kilos, sino más, reaparecen.
Por otro lado, al proponer eliminar ciertos grupos de alimentos como carnes, alimentos ricos en hidratos de carbono, grasas.....estamos perdiendo nutrientes necesarios para nuestro cuerpo.
¡Ojo, no confundir dietas detox con dietas vegetarianas o veganas! Las personas que siguen estas dietas pueden tener una salud genial sin comer carne y productos derivados de animal porque siguen comiendo legumbres, arroz, pasta, frutos secos, cereales....... Pero en las dietas detox se suele limitar la alimentación a frutas y verduras.
Pero, ¿realemente nos limpian el cuerpo por dentro? La respuesta es no. Nuestro cuerpo elimina las sustancias tóxicas a través del hígado, los riñones, los pulmones y la piel. Cuando vamos al baño, cuando sudamos y cuando respiramos eliminamos las sustancias tóxicas provenientes del metabolismo de lo que comemos, de los fármacos y de sustancias como el tabaco y el alcohol.
Los alimentos por si mismos no pueden ayudar a los órganos a realizar esta función.
Ademas, la EFSA (Asociación Europea de de Seguridad Alimentaria) ha probado que las dietas basadas en este tipo de zumos o smoothies pueden ser perjudiciales para la salud, ya no sólo por carencias alimentarias sino también por que aumentan el riesgo de padecer cálculos renales, lo que llamamos 'tener piedras en el riñón'.
Todo esto suponiendo que los zumos los hagamos en casa. Si se nos ocurre comprarlos de la compañía de nutrición de moda, por ejemplo, id sacando la hucha porque baratos no van a ser, y además es bastante probable que estéis bebiendo agua verde con azúcar.
Dieta disociada:
¿Has escuchado alguna vez que es malo mezclar hidratos de carbono y proteínas en el mismo plato?
Según sus seguidores, es beneficioso eliminar ciertos grupos de alimentos de nuestra dieta y sugieren que, si en un mismo plato comemos sólo un tipo de alimentos, (sólo fuentes de proteínas, sólo hidratos de carbono...) nuestro metabolismo será mejor y más efectivo. Esto es, quemaremos más calorías y así podemos perder peso.
Pero, ¿os cuento un secreto? Apenas hay alimentos que contengan sólo un tipo de nutriente.
Me explico, los que te dicen que no puedes comer proteínas con hidratos de carbono te dirán que si tienes un plato de arroz y una pechuga de pollo te tienes que comer el arroz por un lado (los hidratos) y el pollo por otro (las proteínas) ¿verdad?. O que comas los garbanzos por un lado y la carne por otro. Pero ¡¡meeeeeeec!! ERROR El arroz y las legumbres también tienen proteínas.
Además, no tiene ningún respaldo científico el que apoye su eficacia. Cuando los nutrientes se absorben después de la digestión cada uno sigue su propia ruta metabólica.
Dieta alcalina:
Una de mis favoritas por su nivel de INVENCIÓN. Pero primero vamos a ver de qué trata. Sus defensores mantienen que debemos comer alimentos alcalinos para que nuestra sangre deje de ser ácida. Y por supuesto, esto ayudaría a prevenir o incluso curar enfermedades como...... ¡tachán! Sí. ¡El cáncer!
Voy a intentar explicarlo rápido.
1º Nuestra sangre no es ácida. De hecho es un poquito alcalina (lo que llamamos base). Empezamos bien.
El pH es la medida que utilizamos para saber si algo es ácido, o por el contrario es una base o sustancia alcalina. El pH neutro es el 7; menos de 7 es ácido y más de 7 básico (os dejaré una ilustración abajo para que lo veáis mejor). Y el pH de nuestra sangre oscila entre 7,35 y 7,45, osea que no hace falta quitarle acidez.
2º Los alimentos NO PUEDEN cambiar el pH de nuestro cuerpo por sí sólos.
3º Nuestro cuerpo cuenta con un comodín, la homeostasis. Este palabrujo significa que nuestro cuerpo se regula sólo (cuando no hay una enfermedad claro) y si hay algo que provoca un cambio en él, como que la sangre se volviera más ácida, intentaría compensarlo para que todo vuelva a la normalidad.
Por ejemplo, si nuestra sangre se acidifica nuestro cuerpo lleva Calcio de los huesos a la sangre para que ésta vuelva a tener su pH normal.
4º Tanto un pH demasiado bajo, es decir, demasiado ácido, como un pH demasiado alto (alcalino) es peligroso. Por tanto, ¿para qué querríamos cambiar nuestro pH normal?
Por último os dejo unos tips para reconocer cuando una dieta suena a anuncio de curandero:
-Promete que es rápido y fácil.
-Puedes hacerla tú mismo. Por supuesto sin el seguimiento de un profesional de la salud como un nutricionista o un médico.
-Te dicen que es bueno eliminar alimentos o grupos de alimentos.
-No explican cuáles son sus fuentes de información o éstas son dudosas.
-Tiene publicidad hasta la saciedad en Instagram y expertos brillantes en ciencia como Kim Kardashian la siguen y la recomiendan.
Espero que te haya gustado este post. No dudes en dejarme un comentario si te apetece y recuerda, con tu salud 'Que no te engañen'.