Hoy, 7 de abril, se celebra el Día Mundial de la Salud. Según la OMS, la salud es “un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades”.
Todos sabemos las recomendaciones básicas para tener un buen estado de salud física y mental: tener buenos hábitos alimentarios, (donde predominen las legumbres, verduras, hortalizas, frutas y cereales integrales en lugar de alimentos ultraprocesados y azúcares), hacer ejercicio de forma regular, aunque sea en forma de caminata y estiramientos, no fumar y no beber alcohol. Incluso ahora más que nunca nos hemos centrado en la prevención de enfermedades (en este caso la Covid-19), lavándonos las manos con jabón más a menudo, utilizando mascarillas y vacunándonos.
Pero hoy quiero recordaros 3 cosas:
En salud no somos todos iguales:
Tenemos que ser conscientes de que cada grupo de edad o población puede verse afectada por problemas distintos.
-Los niños y niñas por ejemplo tienen un sistema inmunitario (las famosas defensas) más débil y son más propensos a coger cualquier infección, ya sea por virus o bacterias. Por eso una de las cosas más importantes en la población infantil son las vacunas.
-Hay algunos tipos de cáncer que son más frecuentes en hombres que en mujeres, y viceversa.
-Las personas mayores por otro lado tienen más riesgo de desarrollar problemas de músculos, articulaciones etc, por lo que en su día a día tenemos que vigilar cosas como su movilidad para, entre otras cosas, evitar caídas.
Por todo ello, cada grupo de población va a recibir una serie de citas médicas adecuadas a su situación o se nos va a animar a hacernos ciertas pruebas, aunque pensemos que no nos hagan falta. Citologías y mamografías en el caso de las mujeres, revisiones de próstata en el caso de los hombres, pruebas para detectar cáncer de colon en ambos sexos a partir de cierta edad, o simplemente hacernos un chequeo de vez en cuando.
Es muy importante que, aunque no nos llegue una cita a casa, vayamos a hacernos estas pruebas. Nos pueden ayudar, por ejemplo, a detectar un cáncer a tiempo aunque nosotros no hayamos notado nada raro.
Normalicemos el pedir ayuda cuando la necesitemos:
No todos sabemos sobre todo, es normal acudir a profesionales de la salud especializados. Por ejemplo, si tienes dificultades con tu peso, acude a un/a nutricionista. No hay nada de malo en que necesites que te echen una mano, para eso están. Para guiarte en el proceso y darte las herramientas que necesitas para comer mejor.
Tenemos que eliminar YA el tabú de la salud mental. No tienes que tener una enfermedad mental para acudir al psicólogo. Si necesitas acudir a consulta, ve. No te estés aguantando por el que dirán, tu salud es lo más importante. De hecho a todos y todas nos vendría bien ir de vez en cuando, y más aún durante la pandemia.
Si necesitas ayuda de tu médico para dejar de fumar o beber, hazlo. No es nada fácil. Pero se puede conseguir, y más aún con ayuda.
Pero por favor, para todas estas cosas acudid a profesionales de la salud, no a curanderos o a comprar un bote de pastillas de Amazon que no sirve para nada.
Os pongo un ejemplo. Una amiga empezó a tener problemas porque se le caía mucho el pelo. Y se compró un bote enorme de colágeno en polvo (creo que unos 30 euros o más) para solucionar el problema. ¿Creéis que le sirvió de algo? No. Lo que debería haber hecho en todo caso es acudir a un dermatólogo.
Pero no sólo se trata de acudir a la consulta de nutrición o a la de psicología, también tenemos que hacernos revisiones de vez en cuando en el dentista, acudir al dermatólogo si vemos un lunar que crece, revisarnos la vista si llevamos gafas o la audición en el caso de personas mayores o que trabajen expuestos a ruidos, o acudir al fisioterapeuta si lo necesitamos, (ojo, al fisio, no al osteópata ni al quiropráctico).
Y no nos olvidemos de la parte social de nuestra salud. Por desgracia, algunos de estos especialistas no suelen estar incluidos en la Seguridad Social y las visitas o tratamientos pueden resultar muy caros e imposibles para algunos. En otros países ni siquiera tienen acceso a recursos sanitarios indispensables, agua potable o aire limpio. Aunque esto en gran parte no depende directamente de nosotros, sino de nuestros gobiernos.
Ademas, muchas personas también se ven limitadas por alguna discapacidad, ya sea física o mental, y necesitan mayor cantidad de recursos para poder mantener un buen estado de salud. Es nuestro deber integrar a estas personas en la sociedad haciendo nuestras ciudades más accesibles y siendo respetuosos con los demás.
No os fiéis del primer cantamañanas que habla de milagros en internet: Acudamos a los profesionales de la salud.
Todo el mundo sabe que lo peor que puedes hacer si te encuentras mal es buscar lo que te pasa en Google. Además, nos bombardean en cadenas de Whatsapp o redes sociales con estupideces como que hacer gárgaras con agua caliente y limón mata al coronavirus.
Pero como sé que a veces no se puede evitar, al menos consultad fuentes de información fiables y páginas que contrasten los bulos.
Aquí os dejo unas cuantas:
Ministerio de Sanidad https://estilosdevidasaludable.sanidad.gob.es/
MedLine (Biblioteca Nacional de Medicina de los EEUU https://medlineplus.gov/spanish/
Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) https://www.aecc.es/es
Fundación Josep Carreras (leucemia) https://www.fcarreras.org/es
Salud sin Bulos https://saludsinbulos.com/blog/
Pediatría:
Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición https://www.aesan.gob.es/AECOSAN/web/home/aecosan_inicio.htm
Fundación Española del Corazon https://fundaciondelcorazon.com/
Instituto de Mayores y Servicios Sociales https://www.imserso.es/imserso_01/index.htm
Oficina de Atención a la Discapacidad https://oadis.vpsocial.gob.es/
Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios https://www.aemps.gob.es/
Una última cosa, salud no es solo ir al médico o ir al gimnasio. Salud también es relacionarnos con los demás, charlar con nuestra familia y amigos, jugar con nuestra mascota, entrar en contacto con la naturaleza, hacer cosas que nos gusten como leer, tocar o escuchar música, bailar, aprender un idioma, contar chistes, hacer cosas que mantengan nuestro cerebro activo.
Dicho esto cuidaos y cuidad de los demás.